¿TENTACION O PRUEBA?

por Hefzi-ba Palomino

Para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo.

1 de Pedro 1.7

Con frecuencia en las diferentes versiones de La Biblia e incluso en la concordancia, he encontrado que estas dos palabras se toman como sinónimos, es decir, diferentes palabras con un mismo significado, lo cual considero que no hace justicia al propósito de Dios, aunque si son palabras semejantes y parecidas, más no iguales e identificas en su significado.

Si estudiamos el Capitulo I de Job. Por todos conocidos como un verdadero santo y maestro de la paciencia, podemos empezar a considerar varios aspectos bien interesantes, que nos ayudaran a diferenciar estas dos palabras, que están relacionadas y son tan importantes para un cristiano, pues constantemente está sometido a pruebas y tentaciones.

1. Job no sabia, ni lo que Dios pensaba de el, ni lo que Satanás tenia en mente, pues su historia no se había escrito, ni La Biblia se había terminado. Hoy sabemos lo que esta atrás, el presente y conocemos el futuro, porque ya todo esta escrito y Jesucristo nos lo ha dado a conocer.

2. Job vivió aproximadamente 2.000 años antes de Cristo y se calcula que fue contemporáneo de Abraham (El Padre de la fe)

3. ¡Que alto concepto en que tenia Dios a Job; ese es el concepto que Dios tiene de nosotros! Hoy en día, gracias a Jesús y que la Escritura se ha cumplido, sabemos lo que somos para Dios y eso nos debe ayudar a aumentar nuestra autoestima, la confianza que tenemos en El y la esperanza de vida que tenemos en Jesucristo y a tener la certeza de nuestra heredad en Cristo.

4. Satanás no podía tocar, atacar o tentar a Job, sin la aprobación de Dios, como no puede tocarnos, tentarnos, atacarnos o hacernos mal, mas allá de lo que Dios lo permita; porque estamos cubiertos con la sangre de Cristo, vivimos bajo su protección y a nuestro Dios servimos.

5. Dios permite la tentación, para probar nuestra fe. La fe, mucho más preciosa que el oro, es nuestra fortaleza y nuestro pasaporte al cielo. Quien no tiene fe, no agrada a Dios.

De manera que podemos deducir que la tentación viene del enemigo, el sabe bien lo que te gusta, conoce tus debilidades y como tentarte; quiere siempre hacernos caer, hacernos fallar, hacernos renegar de Dios, para irnos a acusar delante de su trono (por eso se le llama el acusador) y Dios se lo permite, porque El quiere hombres y mujeres de verdad; hijos e hijas fieles y fuertes y sabe que si superamos la tentación, somos mas fuertes espiritualmente, nuestra fe se fortalece y nuestro hombre interior se fortalece y vencemos al enemigo.

Adicionalmente, tenemos a Jesús como nuestro Abogado (intercede por nosotros) y si nos arrepentimos, fiel y justo es El para perdonarnos. Sin embargo, hay quienes se escudan en la debilidad, aduciendo que <> para no cambiar su antigua manera de vivir, dándole gusto a la carne y manteniendo prisionero El Espíritu, atrayendo para si condenación.

La prueba, viene directamente de Dios y tiene el mismo propósito: probar nuestra fe. Muchas son las pruebas del justo, pero de todas ellas, nos libra El Señor y cuando tu en medio de la prueba, te aferras a tu Dios, lo alabas y lo bendices, ten la seguridad que estas dando pasos gigantescos de fe; estas creciendo y te estas fortaleciendo espiritualmente y si, al igual que a Job, Dios te priva de alguien o de algo, ten la certeza que al igual que a Job, también te lo devolverá multiplicado por tres.

Da gracias a Dios por las tentaciones y las pruebas, que aunque se presentan como una crisis; son también una oportunidad para crecer en fe y en amor.

Y recuerda que ahora tenemos a nuestro amado Salvador Jesucristo; quien también fue tentado y probado hasta la muerte y ahora, al lado de nuestro Padre Celestial, vive, reina y vela por todos y cada uno de nosotros, para que oremos siempre y seamos libres la tentación. La única forma que Dios ha diseñado para librarnos de la tentación y avancemos en el camino, es que tengamos la fe, la fuerza y la conciencia para superarlas.

No nos ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, Sino que dará también juntamente con la tentación la salida, Para que podáis soportar.

1 Corintios 10.13

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Escrito para www.devocionaldiario.com

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