Jesús y la oración – Maryuris Torres Urueta

JESÚS Y LA ORACIÓN

por Maryuris Torres Urueta

“Y cuando ores; no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Mas tu, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu padre que esta en secreto; y tu padre y tu padre que ve en lo secreto te recompensara en publico”. (Mateo 6: 5, 6).

Hay momentos en que, el Señor nuestro Padre Eterno quiere estar a solas con nosotros, eso fue lo que Jesús le dio a entender a sus discípulos, cuando ellos le pidieron a el que los enseñara a orar.

El les enseño una clase de oración personal, solo el Padre y yo, es un momento de intimidad, donde solo importa esa comunicación entre los dos.

El les dice, cuando oren no sean, como los hipócritas. Los hipócritas siempre quieren que los demás vean que ellos buscan de Dios.

Pero al Señor eso es lo que menos le importa, al Señor lo que le interesa es que tu corazón tenga esa necesidad de él, en lo mas intimo de tu ser, es algo que a solas con él tu puedes sentir, postrado ante tu Señor sin que nadie sea testigo, solo tu y él, donde tu te derramas ante él, donde tus lagrimas caen, donde tu le muestras tu dolor, tus problemas, hay en esa intimidad, es donde él llega , desde lo secreto, donde tu sientes su abrazo su presencia, esa presencia que tanto necesitamos, donde no queremos que nadie nos vea, solo estar con el y no importa el resto del mundo.

Allí con la puerta cerrada, contándole a él lo que no queremos, que los demás sepan, lo secreto, lo que tenemos guardado, y que sabemos que solo él lo entiende, que no nos juzga, que nos entiende, mas que cualquier ser que exista en este mundo.

Saber que tenemos a un Dios, que nos perdona cuando humillados vamos a él en secreto, en silencio, en completa calma y así encontramos la paz, su paz. Que nos tranquiliza y nos alienta.

“Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos.
No os hagáis pues semejantes a ellos; porque vuestro padre sabe que cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis”. (Mateo 6: 7, 8)

A nuestro Padre le encanta que le hablemos, normalmente como hablamos siempre, siendo sinceros , no fingiendo ser alguien que en realidad no somos, no olvidemos que el que mas nos conoce es él , él es nuestro Creador.

Debemos hablar con el con palabras sencillas, no usar palabras que en verdad están de mas, simplemente orar es hablar con Dios, solo eso debemos hacer hablar con nuestro Creador y Padre, claramente y con sinceridad, siendo puros y tal como somos, porque a él no podremos engañarlo nunca.

Porque él lo dice muy claramente, que con palabrerías no seremos oídos, nuestras palabras, no llegaran a él si las utilizamos mal.

Y nos dice también, que él sabe lo que necesitamos, antes que lo pidamos y si él lo sabe, es porque esta pendiente y muy cercano de nosotros sus hijos, como un verdadero Padre amoroso.

Pero, lo que él quiere es que cada uno de sus hijos se acerque a él y le hablemos y le pidamos, pero solo El y tu.

En secreto

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