“Jesús yo confío en ti”

No sé qué puedas estar pasando en este momento, tal vez te sientes sin fuerzas, no encuentras esperanza, no encuentras salida y piensas que lo que estás viviendo no es tan fácil de superar. A veces nos podemos sentir realmente desolados y lo que obra a nuestro alrededor pareciera hundirnos más en ese estado de desesperación y angustia. Hoy quiero decirte que no importa lo que estas pasando, no importa cuán grande es el pantano en el que te estás hundiendo, el Señor no nos desampara, Él pronto estirará su mano y te ayudará a salir del fango en el que te encuentras.

“Así que pongan sus preocupaciones en las manos de Dios, pues Él tiene cuidado de ustedes”. 1 Pedro 5:7 (Traducción en Lenguaje Actual).

Algo que me alienta en cada situación difícil que atravieso es que por más difícil que parezca, para el Señor es mucho mejor, pues su nombre es mayormente glorificado. Me alegra saber que no estamos solos, me llena de satisfacción saber que en Él estamos seguros, que Él no va a fallarnos porque no es como nosotros, Él no miente, Él no rompe su pacto. Sus ojos siempre nos están mirando y su mano victoriosa “Jesucristo” siempre está dispuesta a salvarnos.

No olvidemos que Jesús entregó su vida por nosotros, Él pagó el precio por nuestros pecados, nos regaló la salvación y la vida eterna; para Él no hay absolutamente nada imposible, todo esto que quizá estas atravesando y que te duele, con toda seguridad obrará para tu bien y al final verás la luz del Señor brillar en tu vida e iluminar todo lo que hace parte de ti. Él es fiel, Él cumple sus promesas. Toma su palabra, come del pan de vida que es Jesús y confía plenamente en que tu vida está en sus manos, Él no fracasará contigo, Él te fortalecerá y tú le darás gloria, grandes maravillas hará Él con la situación que estás viviendo.

¿Te encuentras en un fango de dolor? no te angusties, en cualquier momento llegará su mano a rescatarte, en cualquier momento Él aparecerá y te sorprenderá; es más, Él nunca se ha ido de tu lado, Él está pendiente de ti. No dudes de Él, confía en su amor y en su fidelidad. Dile gracias, dile te amo, dile “Jesús yo confío en ti y sé que todo lo que estoy viviendo es para glorificar tu santo nombre”.

No olvides que la palabra de Dios es infalible, si así no fuera se negaría así mismo y Él no sería Dios; pero esto nunca va a pasar porque Él es Dios, nuestro único Dios, el Todopoderoso, Bueno, Justo y Misericordioso. Dios cumple fielmente sus promesas, tu sólo espera en Él; no es fácil, pero es lo más seguro que tienes, tu garantía es su palabra.

“Pero una cosa quiero tener presente y poner en ella mi esperanza: El amor del Señor no tiene fin, ni se han agotado sus bondades. Cada mañana se renuevan; ¡qué grande es su fidelidad! Y me digo: ¡El Señor lo es todo para mí; por eso en Él confío! El Señor es bueno con los que en Él confían, con los que a Él recurren. Es mejor esperar en silencio a que el Señor nos ayude”.

Lamentaciones 3:21-26 (Dios Habla Hoy)

En las buenas y en las malas siempre dile:

“Jesús, yo confío en ti”

Autora: Marisela Ocampo Otálvaro

Escrito para www.devocionaldiario.com

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